A través del Programa Nacional para la Prevención del Suicidio (Pronaps) disminuyó la tasa de incidencia de decesos por esta causa, al pasar de 6.6 por 100 mil habitantes en 2021, a 6.4 en 2022.
No obstante, el trabajo debe continuar para lograr que los servicios de salud mental lleguen a quien lo requiera, informó el titular de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) de la Secretaría de Salud, Juan Manuel Quijada Gaytán.
Estas cifras ubican a nuestro país por debajo de la media mundial, ya que hay naciones que registran hasta 16 suicidios por cada 100 mil habitantes.
Quijada Gaytán destacó que Pronaps es un programa único en la región de las Américas y cuenta con el reconocimiento de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Como resultado de este liderazgo, otros países de la región han pedido apoyo y asesoría para atender este grave problema de salud.
Señales
Enfatizó que se trata de un fenómeno al cual muchas veces se llega tarde por no reconocer las señales de alerta. “Estudios indican que una persona que consuma el suicidio emite hasta 18 señales de alerta antes de ejecutarlo; muchas veces no nos damos cuenta porque no escuchamos a las personas, no las miramos a los ojos, porque no las miramos como iguales y porque pensamos que hay clases sociales; tenemos que entender que este fenómeno ocurre en todos los grupos de población, en cualquier nivel socioeconómico y tanto en zonas urbanas como rurales”.
La responsable del Pronaps, Diana Iris Tejadilla Orozco, aseveró que la pandemia de COVID-19, por una parte y, por otra, la unión de los trabajadores de la salud y la concientización de poner en la mesa el tema de la salud mental, contribuyeron a disminuir la tasa de suicidios.