Un equipo de investigación de la Universidad de Rzesnow (Polonia) ha creado un “revolucionario” yogur probiótico sin conservantes artificiales gracias a una forma “más pura” de cúrcuma.
Los autores del estudio, publicado en la revista Fronties in Nutrition afirman que con este avance, la vida útil de los lácteos podría alargarse y conservar sus propiedades beneficiosas para la salud.
De la combinación de ambos alimentos ha surgido un “medicamento” natural, según explican.
El yogur probiótico es un alimento denominado así gracias a su riqueza nutricional y los más de cien millones de bacterias vivas que hay en cada gramo de producto y que están científicamente probadas como positivas para el organismo.
La cúrcuma
La cúrcuma, por su parte, presenta propiedades antiinflamatorias y antioxidantes avaladas por diversos estudios, además de ser capaz de estimular el sistema inmunológico e impedir la proliferación de bacterias y hongos nocivos.
Los investigadores añadieron al yogur probiótico una forma de curcumina o cúrcuma llamada NOMICU L-100 hidrosoluble, es decir, que se disuelve en agua.
Esta cualidad permite a los alimentos ser absorbibles por el organismo durante el proceso de digestión. Tras ello, compararon el resultado con una combinación de yogur probiótico con extracto de cúrcuma común para ver la efectividad de estos alimentos a la hora de favorecer el crecimiento de bacterias y hongos.
Fuente: mundolacteo.es