México 19 septiembre._El Programa de Entornos Laborales Seguros y Saludables (ELSSA) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) previene que el esfuerzo mental se convierta en un factor de riesgo psicosocial en el trabajo.
Entre ellas, fomentar que empresas establezcan tareas que permitan el desarrollo personal de los trabajadores. Así como aplicar rotación de actividades y distribuir adecuadamente funciones.
Aunque un trabajo siempre conlleva exigencias físicas y mentales, cuando estas últimas son predominantes implican un esfuerzo mental. Si es excedido, puede ocasionar fatiga mental. Ello afecta el rendimiento del trabajador y aumenta la probabilidad de que se cometan errores.
La fatiga mental es la disminución de la capacidad física y mental de un individuo. Ello, después de haber realizado un trabajo durante un tiempo determinado. Se manifiesta por una sensación de cansancio, somnolencia, bajo nivel de atención y torpeza de movimientos.
Fatiga mental
El IMSS señala que, así como un esfuerzo mental excedido afecta a la persona, una baja carga de trabajo. Como cuando hay asignación de pocas actividades laborales o las tareas que se realizan son muy sencillas, también puede tener efectos adversos.
En cualquiera de los dos casos con ELSSA se busca otorgar el tratamiento médico y de rehabilitación necesarios. Así como recomendaciones a las empresas de prevención y promoción de la salud en el entorno laboral.
Cuando el esfuerzo mental en los centros laborales es excedido, puede ocasionar fatiga mental, afectando el rendimiento del trabajador y aumentando la probabilidad de que se cometan errores.
La fatiga puede ser reversible a través del descanso y cambio de dinámicas en el trabajo. Aunque también puede llevar a un estado de fatiga crónica que derive en enfermedades mentales e incapacidad.