El cáncer del cuello uterino es la única neoplasia prevenible al 100 por ciento mediante estrategias de prevención como lo son la vacunación contra el virus de papiloma humano (VPH), la realización del estudio del papanicolaou periódicamente y evitar el consumo de sustancias como el alcohol y tabaco, afirmaron especialistas del departamento de Ginecología Oncológica del Instituto Nacional de Cancerología (INCan).
Explicaron que el cáncer del cuello uterino afecta principalmente, pero no exclusivamente, a mujeres en edad productiva de 35 a 55 años.
Se presenta por el desarrollo y crecimiento sin control de células del cuello del útero.
Este padecimiento tiene la capacidad de provocar metástasis, es decir, extenderse y afectar otros órganos y tejidos.
Indicaron que 99 por ciento de los casos de cáncer del cuello uterino están asociados VPH, que se transmite mediante el contacto de la piel o mucosas, siendo la sexual la principal vía de contagio. Además, factores externos como infecciones —por ejemplo, clamidia y herpes—, así como el consumo de tabaco y alcohol, favorecen su desarrollo.
Mencionaron que, en etapas tempranas, el principal síntoma es el sangrado intermenstrual o durante la práctica de relaciones sexuales.
En etapas localmente avanzadas se registra dolor en extremidades pélvicas, así como síntomas rectales y urinarios. Al desarrollarse metástasis la mujer presentará pérdida de peso, debilidad y deterioro del estado funcional.